bergia en compostela

"...la vida es una suerte y el mundo un disparate..."


este pasado jueves 30 de noviembre me desplacé hasta santiago de compostela para asistir al primer concierto de la gira gallega de javier bergia.

teloneado por dos "talentos" locales, de los cuales simplemente diré que "no comment", y que lo mejor fue la intervención de elenita al violín (pura sensibilidad y dulzura), bergia demostró que se puede hacer espectáculo sin necesidad de anécdotas sonrojantes, virguerías guitarrísticas o vibratos estridentes: él es un maestro del lenguaje, de los acordes y de su propia voz.

el repertorio resultó sorprendente desde el primer minuto, verás. arrancó con niña luisa, mientras yo me preguntaba, atónito: "¡¿cómo es posible que esté cantando a rodrigo?! ¡¿a santo de qué?!". pobrecito de mí, lo que me esperaba. a continuación avanzó algunos de los temas de su próximo disco (de momento sin fecha de salida ni título definitivo, por lo que parece): melancolía, una preciosidad con un espíritu similar al de canción de julio; mitos y pautas, en la que vuelve a recordar a su padre; punto y aparte, uno de los "descartes" del disco y cedaceros, 4, nostálgico flash back de su primer barrio madrileño. fue un placer comprobar que su capacidad compositiva está en plena forma, que su modo de describir paisajes humanos y acontecimientos es cada vez más transparente, y que su facilidad para emocionar es, a estas alturas, indiscutible.

de ahí saltó hasta su disco caracola (1993) para cantar una canción que pablo y yo, en los momentos previos al concierto, repasamos como quien reza el padre nuestro: un obsequio del universo, un claro ejemplo de lo provechoso que resulta componer canciones sin métrica, sin rima, y sin estructura... simplemente fascinante. querido planeta fue la siguiente pieza que abordó, mientras que yo, a tres metros escasos del gigante, me mordía la lengua para no molestar con mis segundas voces.

hasta aquí todo normal: canciones nuevas y clásicas que se funden en completa armonía. pero él quería jugar también a otras cosas, por lo que, dejándome otra vez boquiabierto, disparó déjame deshacerte la cama y linda prima, casi sin dar respiro (¡y sin cambiar de tono!, como muy bien matizó). por si alguien se ha perdido, estos dos temas también pertenecen al cancionero de rodrigo garcía.

derretido ya en mi (incómoda) silla, siguió la sucesión de diamantes con noche infinita y otro estreno, la romántica por los mares de cupido... hacía tiempo que un tema de bergia no me transmitía tanto dolor, tanta pena por la pérdida de un amor. y siguieron las sorpresas: javier colaborará en un disco homenaje a pablo guerrero (producido por ismael serrano) cantando pepe rodríguez, el de la barba en flor; pero en esta ocasión prefirió ir a lo seguro, regalándonos a cántaros. después cayeron nunca te dije, de aquellos años verdes y la gula (que recuperará para este nuevo trabajo).

pero las versiones no habían acabado aún. a bocajarro, y sin mediar palabra, nos espetó una popera visión de cuerpo de ola, de nuestro ángel de la guarda don hilario camacho. entre el público (no demasiado numeroso, y bastante menos entregado) se echó en falta algún comentario sobre lo que supuso la pérdida de hilario. el concierto terminó con una canción dedicada a su padre (sobre tu tumba florida) y la única petición del público que aceptó: dos kilómetros de paciencia.

los que teníamos algo de trato con él (por alguna conversación telefónica, e-mails, etc.), nos sorprendió descubrir a un bergia no especialmente atento con sus admiradores masculinos; bastante más cercano se mostró con alguna otra dama que por allí se dejó caer. pero no es una crítica: se le perdona eso y mucho más. pasamos una noche inolvidable, empañada quizá por esos cinco minutos de conversación que nos faltaban para conocerlo un poquito mejor. bueno, al fin y al cabo, ya sabemos cómo era aquello de las carretas...